Pasó pruebas en Barcelona, nunca lo llamaron y ahora juega en la Liga 2

El jugador peruano empezó su carrera en las divisiones menores de Cantolao, con 16 años disputó la Gotia Cup en Europa y fue ahí donde llamó la atención de los ojeadores de Barcelona. En 2010, recibió una invitación para que pueda entrenar en España y ver si era posible su fichaje por el equipo. En su viaje por Europa, conoció hasta a Xavi Hernández, hoy técnico catalán.

Junior Ponce tenía la información de que el club se comunicaría con él cuando cumpla la mayoría de edad, pero esto nunca sucedió. Fue así que en 2012 firmaría su primer contrato profesional con Alianza Lima, un año después el Hoffenheim de Alemania ofrecería 300 mil euros para fichar al jugador por varias temporadas.

Más noticias de Alianza Lima:

Se salvó de ir a la cárcel y ahora Reynoso le da la mano

En su mejor momento, lo que ganaba Farfán en Alemania

Sin posibilidad de debutar en el primer equipo alemán, volvería a Alianza Lima cedido y en el año 2014 sería parte del equipo que ganó el Torneo del Inca, de la mano de Guillermo Sanguinetti. Finalizado su préstamo, fue nuevamente cedido a Vitoria Setubal de Portugal. El equipo alemán no lo tenía en sus planes y solo estaba esperando que termine su contrato. 

Regresó al Perú en 2017 para fichar por la Universidad San Martín. Ya sin posibilidad de regresar al extranjero, el jugador pasó por diversos equipos del torneo peruano como UTC de Cajamarca, Cantolao y Chancas CYC. Actualmente, a sus 28 años defiende los colores de Santos FC, equipo que participa en la Liga 2. 

Un talento desperdiciado

Siendo un jugador con un prometedor futuro, hábil con el balón, rapido, encarador y especialista en el uno contra uno, se vio envuelto en casos de violencia familiar y no tuvo la disciplina que se necesita en el fútbol. Sin oportunidad de levantar su juego, quedará en la historia como una de las promesas perdidas del fútbol peruano.